Cap 5 Sangre Argentina

Por Sarah Catheryn   Publicado a las  11:16 p. m.   0 comentarios

Capitulo 5 La Ceremonia


Nota: no tengo la más mínima idea de cómo era la casa de Mariano Moreno, si creen que estoy muy desubicado, no se enojen
La figura se deslizo con lentitud por el suelo de madera, descalza y vestida con un raído vestido blanco, la muchacha no media mas de un metro cincuenta y ocho, y su lacio pelo negro caía por su espalda hasta su cintura. Camino con lentitud hasta estar frente a la cama.
-Hola-dijo con vos inocente y tranquila, con un toque de diversión- me manda el señor, quiere que los lleve a ambos hasta el lugar donde se celebrara la ceremonia.


-¿Que ceremonia? ¿A dónde nos quieres llevar?- pregunto de manera temerosa Florencia
-El sótano de la casa del Sr. Moreno fue el elegido para que esta ceremonia se celebre, todos lo que pertenecen a nuestra clase deben asistir- dijo mirando a la joven dama, y luego se dirigió a Juan Carlos- los aperitivos también son bienvenidos- dijo mostrando sus blancos dientes con una angelical sonrisa.
-¿Cómo me llamaste?- interpelo el hombre furioso.
-Aremos lo siguiente-dijo haciendo caso omiso a Juan Carlos-los llevare asta el carruaje, pero deben hacerme caso en todo lo que les diga ¿Están de acuerdo?-interpelo, estando ahora un poco mas seria-Debo decirles que no tiene opción ante el echo de venir conmigo.
-No lo se…-hablo Florencia- ¿Qué dices?-le pregunto a su hermano mayor.
-Vayamos-dijo seguro pero serio-no podemos negarnos y de cualquier manera yo te protegeré. Quédate tranquila.
-Tómame la mano Florencia- intervino la mas pequeña –por cierto mi nombre es Maria.-termino con una sonrisa.
Lo joven se acerco a la niña paso a paso, muy lentamente, tratando de ocultar su miedo, que llegaba a cada fibra de su cuerpo. Cuando llego, tomo lentamente la mano de Maria. ’’No tengas miedo’’le susurro la mas chica y justo en el momento en que la mano de la pequeña se cerro en la suya, sintió como si cada músculo de su cuerpo se congelara y se pusiera rígido como una roca, lentamente sus parpados se cerraron y se quedo quieta como una estatua. Luego sintió como si una gran fuerza la golpeara en todo el cuerpo. Un momento después, se podía mover y se encontraba delante de una puerta de madera en el interior de una casa que parecía desierta.
-No te muevas de aquí-le ordeno Maria-Ahora volvere con tu hermano.
Mientras esperaba, Florencia se dedico a ver cada uno de los cuadros colgados en la pared del pasillo en el que se encontraba. Eran desagradables, pues retrataban escenas de asesinatos sangrientos. Florencia se acordó inmediatamente de el dibujo que había visto en el libro unas horas antes.
Se estremeció.
-Hola-dijo alguien detrás de ella, haciendo que se sobresaltara-Parece que te asuste- le hablo Maria con tono divertido. Detrás de ella estaba Juan Carlos.
-Hermano-suspiro Florencia con alivio, y corrió a abrazar a su hermano. Este le correspondió.-¿viste lo que hizo?-le susurro en el oído-Nos congelo y nos trajo hasta aquí muy rápido ¿Cómo lo hizo?
-No tengo ni idea-le respondió su hermano, también en susurros-pero parese que es algo muy importante.
Justo cuando Florencia le iba a decirle que eso era una completa obviedad, Maria los interrumpió- No hay tiempo, el amo espera.- y abrió la única puerta en el pasillo.
En el interior estaba alumbrado con un gran candelabro que colgaba del techo y a pesar de ser velas las que alumbraban, estas no desprendían calor, solo luz. Había varias mesas con muchas personas sentadas alrededor de ellas, todas vestidas todas con ropas negras. Al final de la habitación había un gran trono, y en el estaba sentada una persona, a la cual Florencia reconoció, era su visitante.
Lentamente, como atraída por un imán, Florencia se acerco a Federico. Todos miraban expectantes mientras ella se acercaba, su hermano había querido ir a detenerla pero Maria se lo negó en voz baja, ‘’Estara Bien’’ le dijo.
Cuando Florencia llego a donde estaba su ‘’amigo’’ este la saludó calidamente.
-Bienvenida seas Florencia,¿Cómo has estado?-la saludo con una sonrisa-¡Que pregunta!¡Pero si nos acabamos de ver!-se burlo de si mismo.
-Hola-le respondió tímidamente la muchacha-¿Me has mandado a llamar?
-Oh si-es que pensé que antes de curarte debías informarte sobre tu ‘’enfermedad’’ como tu la llamas-le dijo un poco mas serio Federico-¿Quieres saberlo? Yo creo que si, saberlo te abrirá mas puertas, te permitirá vivir otra vida, mi querida Florencia,-le dijo con tono solemne.
-Cuéntame-dijo decidida la dama-Quiero saberlo todo.
-Por donde empezar, por donde empezar…-se dijo para si mismo, para luego hacer una pausa- ¡Ha si ya se!-dijo de repente-Dime Florencia reconoces este libro-le pregunto, sacando de repente y de quien sabe donde un libro de tapa roja y sin titulo. Era el libro que había estado leyendo esa noche.
-Si lo reconozco-le respondió rápidamente la chica-habla de unos seres nocturnos que beben sangre, lo estaba leyendo, porque me dio curiosidad por la persona que me ataco.
-Lo curioso Florencia-le hablo Federico- es que no era una persona… no era humano. Yo tampoco lo soy, nadie aquí además de ti y de tu hermano lo es.-la chica lo miro anonadada- Veras Florencia, hace miles de años, cuando apareció la raza humana, apareció otra muy parecida, los llamados ‘‘vampiros’’. Esta raza era igual a los humanos, físicamente hablando, solo que más inteligente y atractiva, además se alimentaba de sangre, no de cualquier sangre, sino de sangre humana. Vivieron junto a los humanos muchos años, hasta que las personas, al ver el potencial de esta raza, la atacaron, la lucha no duro mucho, a pesar de su poder, los vampiros eran vulnerables ante las armas del hombre, por eso decidieron retirarse. Y a partir de entonces solo tenían contacto con los humanos para alimentarse y lo hacían pasar como el ataque de un animal o algo por el estilo.
-¿Y eso que tiene que ver conmigo Federico?-cuestiono Florencia.
-A lo que voy querida, es que esa raza sobrevivió, sobrevive. Ya me has escuchado cuando dije que nadie aquí era humano, nosotros somos vampiros y aquella bestia que te ataco también lo era.
-¿Y a mi que me sucede? ¿Esa cosa me contagio una enfermedad?-siguió preguntando la muchacha cada vez mas desesperada.
-Veras Florencia, querida, nuestra especie se reproduce con el contagio. Si al matar a una persona no decapitamos el cadáver e incineramos la cabeza, esta persona despertara de la muerte como uno de los nuestros- explico el no-muerto – Nuestra mordedura esta maldita, y tú has sido mordida, pero también has sobrevivido. En este momento estas en una transición decisiva para ti, si te ‘’curas’’ ahora serás una humana mas y seguirás con tu aburrida vida, pero si eliges ser uno de los nuestros, serás un ser eterno, de belleza exuberante y con unos dones inimaginables. Tú decides querida, si ser el gato o ser el ratón.
-¿Y que hay de mi hermano? ¿Que será de el si decido unirme a ustedes?-interpelo Florencia. Federico la miro fijamente a los ojos, ella ya no estaba atemorizada, en sus ojos había decisión y preocupación por su hermano.
-Eso ya lo hablaremos.

Acerca del Autor

Nos dedicamos a brindar información a todos los fans de la Saga Crepúsculo. Desde entonces nos hemos encargado de cubrir premieres, eventos, actualizar día a día nueva información sobre el cast. Después de que terminó la épica Saga en Noviembre del 2012, seguimos los proyectos de cada actor como corresponde.
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